Tu mente puede ser tu cárcel o puede ser tu combustible para sacar todo tu potencial.
La mente es compleja, tan compleja que a día de hoy todavía no se comprende del todo, y sigue siendo un gran misterio, es el único órgano que intenta explicarse a si mismo.
Esta formada por recuerdos, por cultura, por educación, por experiencias, por creencias y por muchos más condicionantes.
Vivimos y funcionamos con ella todos y cada uno de los días de nuestra vida y sigue siendo la gran desconocida.
Igual que no sabes conducir un coche, si no sabes como funciona y como se hace, lo mismo pasa con tu mente, si no sabes como funciona y que hacer, ella te gobierna a ti.
Ella tiende a querer mas y mas, es vaga y quiere las cosas cómodas, se preocupa en exceso y nos mantiene constantemente en el pasado, nos genera todo tipo de emociones negativas, como depresión, ansiedad, celos.
Vivimos en el pasado o en el futuro, y nos cuesta muchísimo estar en el presente, pensamos que mañana cuando tengamos nuestra vida de la forma en la que nos gustaría que este, es cuando realmente si que nos toca ser felices, pero ¿sabes que?
Cuando llega mañana hay un grave problema y una nueva situación que no nos termina de contentar, y no importa de cuantas cosas materiales llenes tu hogar, o de si cambias de ciudad, porque esa sensación de vacío o esa sensación de dolor te perseguirá haya donde vayas.
Pregúntate cuando fue la última vez que fuiste feliz con las pequeñas cosas, paseando por un parque, tomando un café, hablando con un amigo, o estando en silencio con esa persona que amas.
Y si es cierto que de nuestra mente depende gran parte de nuestra vida, en la corteza prefrontal es donde se almacenan los recuerdos y es esa parte analítica dentro de nosotros.
Pero tu no eres solo tu mente, tu mente es parte de ti, tu eres un ser con una conciencia, no eres un robot al que le han implantado un órgano y que actúa como si fuera un autómata.
Entiende que vivimos en un mundo dual y que la mente no se salva de esto.
Nos aferramos mucho a los momentos dulces y a las emociones placenteras, pretendiendo que la vida debería de haber sido así, y nos cuesta mucho aceptar esa parte de sombra o esa parte de oscuridad, pero la realidad es que sin una no existiría la otra.
Sin la noche no puede existir el día, aborda esto desde una forma mas consciente y tomate esto como parte del proceso, porque si no vas a sentir constantemente una frustración, cada vez que vuelvas a caer o si no ves resultados inmediatamente.
Primero para poder gestionar tu mente es entender que a la mente hay que entrenarla y que hay que hacerlo constantemente, hay personas que piensan que con un consejo mágico o un tips milagroso ya se va a solucionar todo, pero no es así de fácil.
Entiende que eres tú el que tiene que hacerlo, nadie lo puede hacer por ti, los recursos las herramientas y los profesionales están ahí para ayudarte, pero nadie puede caminar por ti si tú no decides caminar.
Decide recorrer tu proceso, porque la decisión es uno de los grandes poderes que tenemos, una decisión firme y honesta puede cambiar tu vida por completo.
Tú como ser, puedes decirle a tu mente que se calle o que actúe de determinada forma y ella esta ahí para servirte, pero a veces esto cuesta asimilarlo, pero debes saber que es una habilidad que tienes y que puedes desarrollar.
Céntrate en el sistema que vas a construir y avanzar en esa dirección y no en la meta, ¿Por qué? Por que la mente siempre tiene expectativas y miras de futuro, y siempre se va a cuestionar cual va a ser el resultado, normalmente queremos conseguir ya los resultados, si solo te centras en eso, puede que te desesperes y difícilmente vas a conseguir algo así, en cambio si te centras en tu día a día es cuando vas a obtener resultados.
Si construyes un día a día de aprender de meditar, de hacer ejercicio, de tener buenos hábitos, y disfrutas de ello, inevitablemente vas a tener resultados.
Trata de verte a ti y a tu mente como un espectador, porque cuando eres un observador eres capaz de afrontar las situaciones de una forma objetiva, de una forma externa y analítica, por lo tanto eres mucho más capaz de razonar y de llegar a una solución mucho más rápido.
Mantente a raya de todos esos mecanismos involucrados y seas capaz de verlo con otro prisma.
Medita, porque la meditación va más allá de la mente y de sus límites, te permite llegar al subconsciente, te permite calmar las aguas y ver la vida con un enfoque y una conciencia completamente diferente.
Puedes resolver un problema si eres capaza de mantener un distanciamiento entre el problema y tú, la mayoría de problemas existen porque no se comprenden con claridad y la meditación te da esa claridad.
Cambia el foco de atención, porque cuanta más atención está poniendo a ese sentimiento o a esa situación, mas vida cobra, mas poder y mas influencia dentro de ti. Desvía la atención, cambia el foco y enseguida saldrás de esa mala emoción y puedas abordarlo mucho mejor.
Sal a la calle y observa, pon atención al entorno, en otras personas, edificios, arboles, cualquier cosa por la que puedas sentir agrado, esto hace que tu atención deje de estar fija dentro de ti y pase a estar fuera, dejas de ser introvertido para estar extrovertido, pruébalo y enseguida notaras los resultados.
Pero lo mas importante de lo que lees, escuchas y aprendes, no es toda la información que acumulas dentro de ti, si no lo que aplicas en tu día a día.
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